POR ESTA RAZÓN “Damsel” podría ARRUINAR tu idea de las HISTORIAS de PRINCESAS
La historia se desarrolla cuando Elodie descubre que su unión con un príncipe encantador es, en realidad, una artimaña cruel. La familia real, que prometió ser su refugio, la destina como sacrificio para aplacar a una feroz dragona al que deben una antigua deuda. Este giro inesperado lleva a la princesa a enfrentarse a su propia supervivencia y convertirse en una heroína.
La historia en general es atractiva. Llevadera. No te deja un minuto para bostezar. Te tiene atrapado los 100 minutos de duración. Vas a encontrar un vestuario increíble, unas locaciones fantásticas unos efectos visuales interesantes, bien desarrollados, un elenco de actores y actrices con una larga trayectoria, una antagonista vengativa y un desenlace que no te lo esperas. Aunque la trama es entretenida. Se entiende cuál es el mensaje detrás del film: empoderamiento femenino. Punto.
Millie lleva parte del peso de la historia mientras interpreta a un personaje complejo y multifacético. A pesar de ser una de las pocas actrices en pantalla durante, diría, casi toda la película.
Brown logra mantener la atención del espectador y transmitir las emociones y el desarrollo del personaje de manera convincente. El mensaje de emancipación feminista es obvio y Damsel, lo desarrolla sin disimulo.
Si vamos a comprobar que Millie está hecha para soportar lo que venga, una heroína al estilo, por ejemplo, de Leticia Ortiz, personaje de la saga cinematográfica Rápido y Furioso (Michelle Rodríguez) que la vez volar de un auto a otro o por los aires y rescatada por Toretto, que la cagan a golpes y siempre quedan de pie y se lastiman un poquito)
Es un personaje cuyo desarrollo se ve afectado por una narrativa desigual. A pesar de los esfuerzos de la actriz, a menudo se siente desconectado de la audacia que la trama intenta proyectar sobre ella.
Por un momento pensé que iba a romper la cuarta pared, como lo ha hecho en Enola Holmes… pero no… me quedé con las ganas, ya que el guión en Damsel te va diciendo como van a sucederles las cosas…
Intenta transmitir mensajes sobre el empoderamiento femenino y la independencia, pero su ejecución resulta ambivalente. La película se enfrenta al desafío de balancear la violencia y los valores que desea promover, a menudo cayendo en la trampa de reforzar los estereotipos que busca criticar.
La película termina por contar dos historias a la vez. Una fábula bien intencionada y también, una perspectiva acerca de cómo es ser una mujer joven en un mundo duro.
El film y nuestra protagonista, es algo más que una princesa en medio de una situación que la sobrepasa. También, es una heroína.
En todo momento mientras veía el film, me acordaba de Shreck, por cómo están dadas las cosas dentro de la película, pero, pero, pero… lo que pasa en este tipo de producciones, cuando tenes un personaje central, una princesa que está a punto de emprender su propio relato de caída, lucha, supervivencia y redención, pero en el enredo de la cultura woke.
La historia como les decía, busca retar ese popular personaje en las historias tradicionales. Ella se salva a sí misma de muchas maneras. si piensas que en cualquier momento aparece el príncipe y la salve, y… no. No esperes a ningún príncipe. Ésta es una damisela que, después de todo, necesita ser salvada (...)
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